lunes, noviembre 12, 2012

MENSAJE DE JOSE MARIA VIGIL


Oiko-teología
Participar en la gran transformación

JOSE MARIA VIGIL con integrantes del Equipo ECOTEOLOGIA (Unisinos,  Brasil)

El nuevo relato sobre la Realidad que la cosmología moderna nos presenta, es lo que más profundamente está transformando la conciencia de la Humanidad. El conjunto de las ciencias de la naturaleza lleva varios siglos desplegándose de forma sorprendente ante nuestra asombrada mirada. Estamos ante una explosión del conocimiento científico sobre el Universo, sobre la Realidad misma.

Este conocimiento nos está revelando una imagen nueva del Universo, una imagen nueva de la Materia, de la Naturaleza, de la Vida, del Ser Humano, y —como resultado— un nuevo sentido de todas las cosas, y un nuevo sentido del Todo, de la Realidad. Qué es esto, qué somos, qué sentido tiene el cosmos, qué sentido tenemos nosotros mismos... son las grandes eternas preguntas que nuestra generación vuelve a plantearse de un modo nuevo a como se la plantearon todas las generaciones anteriores. Y la razón de esta novedad es que ninguna generación como la nuestra dispuso de tanto conocimiento científico sobre la Realidad en que vivimos, de la que somos parte, la Realidad que nosotros mismos somos, no dualmente.

Para las personas religiosas, esta explosión del conocimiento científico de los últimos cuatro últimos siglos tiene un valor «revelatorio». La Revelación no se da sólo —como habíamos pensado chauvinísticamente— en el «segundo libro», en la «Escritura» que las religiones del libro veneran, sino sobre todo en el «primer libro», aquel «libro» que escribió Dios antes de que los humanos diéramos forma a las Escrituras Santas de las distintas religiones. Ya Platón había dicho que la Creación era una carta que los dioses habían escrito a la Humanidad... San Agustín, más tarde, dijo que Dios escribió dos libros, no uno solo, y que el primero de los dos libros es la Realidad misma, la Creación, la Vida. Las Escrituras —hemos sabido después nosotros— las escribieron las religiones más tarde, precisamente para comentar el primer libro, y concretar así cómo habérselas con la Realidad.

Libro, lo que se dice libro, sólo lo es el primero, el gran libro de la Realidad, un libro enteramente original y —digámoslo así— escrito sólo por Dios. El segundo no sería en verdad un libro, sino un comentario al primero. Sólo que no fue escrito ya por Dios, sino por nosotros los humanos, cuando el primer libro casi no se había abierto, cuando apenas lográbamos pasar unas pocas páginas más allá de la portada, cuando no sabíamos prácticamente nada de la realidad de este cosmos, cuando no alcanzábamos a entender —intus légere, intelligere, leer por dentro— en ella nada de lo que hoy nos maravilla, nos asombra y casi nos deslumbra. Es por eso que nuestro «comentario» al primer libro, nuestras Escrituras, divino-humanas, están sujetas a la cultura —¡y a la ignorancia!— del tiempo en que fueron escritas, totalmente diferente al de hoy.

La teología clásica se ha esforzado por permanecer leyendo fielmente siempre dentro de las Escrituras. La eco-teología se caracteriza por su afán de leer, además, y como punto de partida, el primer libro, y junto a él, el comentario inspirado de nuestros antepasados en la fe, pero confrontándolo ahora con todo lo que sus autores no sabían y que nosotros sí sabemos, lo que nos suscita nuevos comentarios, bien diferentes, y bien nuestros... Es por eso por lo que a la eco-teología se le hace evidente la necesidad de reajustar, releer y recrear tantas visiones y concepciones religiosas que los humanos hemos elaborado cuando casi no podíamos ni siquiera abrir las primeras páginas del libro de la Realidad, que hoy nos abruma y deja atónitos y sobrecogidos por las revelaciones inéditas e inabarcables que diariamente nos hace... en lo macroscópico y en lo microscópico, en lo infinitamente grande, en lo infinitamente pequeño, y en lo infinitamente complejo...
Tomada de http://www.anigamiart.com/?page_id=27
 La eco-teología tiene la posibilidad y el deber de colaborar a esta gran transformación actual, la transformación de la conciencia de la humanidad, tal vez la mayor transformación registrada en toda nuestra trabajada historia evolutiva. El nuevo relato cosmológico nos está diciendo que vivimos en un mundo diferente del que pensábamos, diferente desde luego del que conocieron los autores del comentario al primer libro, nos dice que nosotros somos otra cosa de lo que pensábamos, y que nuestro sentido en la realidad y en la historia es también otro. 

Es una revolución cognoscitiva, una metanoia, el nacimiento a una nueva etapa evolutiva, el final de la edad de piedra de la consciencia religiosa planetaria.
  • Hacer eco-teología es leer y escuchar, y hacer escuchar el libro primero en el que la Divinidad de la Realidad se expresa, colaborar a situar a la Humanidad de pie sobre las bases más sólidas de su saber: no ya sobre mitologías, ni sobre filosofías o elaboraciones propias, sino sobre la Realidad real, el más incontestable de los fundamentos, tal como lo conocemos hoy.
  • Hacer eco-teología es ayudar a las religiones a adecuar su patrimonio simbólico, con la Realidad, ayudarles a prestar este servicio de actualización en favor de la Humanidad de hoy y del mañana. Nuestros antepasados hicieron su comentario al libro primero, pero a nosotros no se nos prohibe hacer el nuestro, a nuestra nueva medida. No estamos condenados a mirar al pasado, ni a repetir la historia; podemos, debemos dar nuestra palabra, expresar nuestro propio comentario al libro de la Realidad, desde el nuevo relato cosmológico —la nueva captación científica de la Realidad— que hoy tenemos.
  • Hacer eco-teología significa reconciliar a la humanidad con la Realidad -ante la que antes estaba de espaldas, por ignorancia, y por dualismos heredados culturalmente-, significa ayudar a la Humanidad a volver de su exilio, a volver a su hogar ancestral, del que nunca debiera haberse apartado.
  • Hacer eco-teología es pues una forma de ser catalizadores de la historia, de participar co-creativamente en la evolución biocósmica, de ayudar a asumir una nueva frontera evolutiva de apertura a la Realidad.
  • Hacer eco-teología es una forma privilegiada de salvar nuestro oikos, por lo que debiera ser respetada y apoyada con todas nuestras fuerzas.


Felicitaciones, Equipo de Eco-Teología, por esos 10 fructuosos años.

Que sean muchos más.




José María Vigil
Panamá, 12 de noviembre de 2012

ENLACES SUGERIDOS:
http://latinoamericana.org/
http://www.eatwot.org/index.php?option=com_frontpage&Itemid=1
http://www.servicioskoinonia.org/


SOBRE EL AUTOR:
José María, es un sacerdote claretiano, nacido en España, naturalizado nicarguense y con residencia actual en Panamá.. Es conocido por su actividad cibernética, como moderador del sitio www.servicioskoinonia.org, coordinador de la Agenda Latinoamericana Mundial, sus servicios a la Asociación de Teólogos y Teólogas del Tercer Mundo,  los aportes a la espiritualidad de la liberación, la  teología del pluralismo religioso y la ecoteología (http://www.servicioskoinonia.org/relat/411.htm)