Luz Stella
Millán P.
Martha
Pinzón J.
Germán
Mahecha C.
El pasado lunes 18 de abril en el
auditorio Luis Carlos Galán de la Pontificia Universidad Javeriana, se dio inicio
al Simposio Javeriano sobre la carta encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco,
con el Seminario titulado: “El cuidado de la Casa Común. Lectura desde la
Economía”.
El Padre Jorge Humberto Peláez S.J.,
rector de la Universidad, en su discurso de apertura, nos hizo pensar en la casa
como un lugar donde se despierta cada día y donde se nos provee entre muchas
cosas, recuerdos, descanso, identidad y patrimonio, razón por la cual es
importante valorar y apreciar el significado de cuidar lo que el Papa ha
denominado como Casa Común: el Planeta Tierra.
El simposio en el que participaron expertos
nacionales e internacionales, plantearon sus visiones desde el sector público,
la empresa privada, los organismos multilaterales y la academia; desde diferentes problemáticas como el cambio climático, el
consumismo humano, la pobreza, presentando soluciones optimistas como el
desarrollo de las energías renovables, el desarrollo del ecoturismo como
territorios de convivencia, la redistribución de la riqueza y programas como la
prosperidad compartida, entre otros, con el
propósito de responder al objetivo de “Divulgar y facilitar la comprensión,
el análisis e impacto de las ideas expresadas por el Papa Francisco en su
Encíclica LAUDATO SI’, enmarcándolas en la problemática mundial actual y con
énfasis en la coyuntura actual de nuestro país y en la forma en que las ideas
expresadas aportan a la construcción de la paz y de un nuevo país”…
Con
este simposio, la Universidad inicia un camino de reflexión que la llevará a
fortalecer su meta de alcanzar una sostenibilidad integral, mediante un
desarrollo sostenible en todas las áreas, donde pensar en una nueva economía
para enfrentar la crisis, reafirma las palabras del Papa Francisco cuando expresa
que “somos una sola familia humana. No hay fronteras ni barreras políticas o
sociales que nos permitan aislarnos, y por eso mismo tampoco hay espacio para
la globalización de la indiferencia”[1].
La Casa Común como proveedora de
productos y servicios ambientales debe ser sostenible en el largo plazo, lo que
equivale a tener justicia intergeneracional ambiental, social y económica, al
tiempo que debe ser generadora de paz, entendida ésta no como seguridad sino
como tranquilidad. Una paz que es un bien universal. Una afirmación donde se
evidencia que “no hay dos crisis separadas, una ambiental y la otra social,
sino una única y compleja crisis socioambiental”[2].
A manera de conclusión podemos decir
que el aspecto económico planteado en este primer seminario, presenta un
mensaje altamente integrador pues la interrelación entre ser humano y
naturaleza permite divisar espacios para la construcción de la tan anhelada paz
social, sin desvincular la paz con la naturaleza, porque “los poderes
económicos continúan justificando el actual sistema mundial, donde priman una
especulación y una búsqueda de la renta financiera que tienden a ignorar todo
contexto y los efectos sobre la dignidad humana y el medio ambiente”[3].
[1]Francisco, Laudato Si’,
No. 52.
[2]Francisco, Laudato Si’,
No. 139.
[3]Francisco, Laudato Si’,
No. 54.